Seleccionar página

En el mundo digital actual, el correo electrónico sigue siendo una de las herramientas más importantes para la comunicación profesional. Sin embargo, muchos correos acaban en la carpeta de spam o son directamente rechazados por los servidores de destino. La causa más habitual: falta de autenticación del dominio. En este artículo aprenderás qué son los registros SPF, DKIM y DMARC, y cómo configurarlos correctamente en tu servidor (por ejemplo, si usas Plesk u otro panel de control con DNS gestionados).


¿Qué son SPF, DKIM y DMARC?

Antes de entrar en configuraciones técnicas, conviene entender qué hace cada uno:

  • SPF (Sender Policy Framework): autoriza qué servidores pueden enviar correos en nombre de tu dominio.
  • DKIM (DomainKeys Identified Mail): firma digitalmente los correos salientes, permitiendo al servidor receptor verificar que no han sido modificados.
  • DMARC (Domain-based Message Authentication, Reporting and Conformance): indica qué hacer si un correo falla las comprobaciones anteriores, y ofrece informes.

Paso 1: Configurar el registro SPF

El registro SPF es un registro TXT que se añade a la zona DNS de tu dominio. Su formato básico es:

iniCopiarEditarv=spf1 +a +mx ip4:TU.IP.PUBLICA ~all

¿Qué significa?

  • +a: autoriza la IP del registro A del dominio.
  • +mx: autoriza los servidores de correo definidos en los registros MX.
  • ip4:...: autoriza explícitamente una dirección IP adicional (normalmente la del servidor).
  • ~all: indica que cualquier otro origen no autorizado será aceptado con advertencia (modo relajado).

📌 Es importante que no haya más de un registro SPF por dominio.


Paso 2: Activar DKIM en tu servidor

DKIM requiere una clave pública que se publica en DNS y una clave privada que tu servidor usa para firmar los correos.

En servidores compatibles (como Plesk):

  1. Activa la opción “Firmar correos salientes con DKIM”.
  2. El sistema generará automáticamente un registro DNS tipo TXT con este nombre:
cppCopiarEditardefault._domainkey.tudominio.com
  1. El contenido será algo como:
iniCopiarEditarv=DKIM1; k=rsa; p=MIIBIjANBgkqhkiG9w0BAQEFAAOCAQ8AMIIBCgKCAQE...

Este registro se añade a la zona DNS. Algunos proveedores requieren dividir el valor en varias líneas, pero la mayoría lo acepta como una sola cadena larga.


Paso 3: Añadir un registro DMARC

Este es el paso más avanzado, pero también muy recomendable. DMARC indica a los servidores de correo cómo actuar cuando un mensaje falla las validaciones SPF o DKIM.

Ejemplo básico (modo observación):

Nombre del registro:

nginxCopiarEditar_dmarc

Tipo:

nginxCopiarEditarTXT

Valor:

iniCopiarEditarv=DMARC1; p=none; rua=mailto:postmaster@tudominio.com; aspf=r; adkim=r

¿Qué significa?

  • p=none: no rechaza correos que fallen, solo reporta (útil al principio).
  • rua: email donde recibirás informes agregados.
  • aspf=r / adkim=r: modo relajado de coincidencia (más flexible).

Posteriormente puedes cambiar p=none a p=quarantine o p=reject para endurecer la política.


¿Cómo verificar que todo está funcionando?

Existen herramientas online gratuitas que te permiten verificar cada parte:

También puedes enviar un correo a una cuenta de Gmail y comprobar si aparece la opción “firmado por…” o si puedes ver los encabezados del mensaje con spf=pass, dkim=pass y dmarc=pass.


Conclusión

Implementar SPF, DKIM y DMARC no solo mejora la entregabilidad de tus correos, sino que protege tu reputación como emisor y reduce el riesgo de que alguien suplantando tu dominio envíe correos fraudulentos. Aunque al principio pueda parecer técnico, una buena configuración solo se hace una vez y tiene beneficios duraderos.

¿Estás seguro de que tus correos están llegando a tus clientes?
Configura bien tu autenticación y olvídate de las carpetas de spam.